Legalizar placas solares: ¿Cuánto se tarda y cómo hacerlo?

La creciente concienciación de la ciudadanía para frenar el cambio climático está transformando su mentalidad en cuanto a temas tan cotidianos como puede ser el transporte o el consumo responsable de energía. Dentro de este último apartado muchos usuarios se plantean además qué procedencia tiene la energía que utilizan en su día a día. 

Durante el 2023  la generación de energía renovable en España creció un 15,1% y logró representar el 50,3% de la producción eléctrica a nivel nacional. Durante este mismo año, la energía solar ha ocupado el 20,3% de la generación total.

En la era de la sostenibilidad, cada vez más personas optan por instalar placas solares en sus viviendas. Sin embargo, uno de los pasos cruciales que no se puede ignorar es la legalización de las placas solares.

¿Cuánto tarda Industria en legalizar la placas solares?

El tiempo que puede tomar la legalización de una instalación solar puede variar considerablemente. En general, los trámites más largos, que solían extenderse por varios meses, se están reduciendo gracias a la mayor conciencia y esfuerzo por parte de las administraciones públicas. Sin embargo, todavía existen casos en los que el proceso puede tardar entre 2 y 4 meses, o incluso más en algunas regiones de España.

Es importante destacar que la duración del proceso depende en gran medida de la comunidad autónoma en la que te encuentres. Algunas, como Baleares, Canarias, Andalucía y Madrid, han logrado reducir el tiempo de espera significativamente, en algunos casos a menos de un mes. En cambio, otras como Castilla y León aún enfrentan retrasos que pueden extenderse hasta seis meses.

¿Cómo legalizar las placas solares?

El proceso de legalizar placas solares consta de varios pasos clave que se deben seguir para asegurar que tu instalación esté completamente en regla y puedas disfrutar de todos los beneficios que esto conlleva.

Permiso de obra

Antes de instalar las placas solares, es imprescindible obtener un permiso de obra del ayuntamiento. Este paso es obligatorio en todos los municipios de España, aunque el trámite puede variar dependiendo del lugar. En algunos municipios, el proceso es sencillo, mientras que en otros puede ser más complejo y requerir más documentación. Nosotros realizaremos este proceso por ti para que no tengas que preocuparte por nada.

Instalación de placas solares

Una vez obtenido el permiso de obra, puedes proceder a instalar las placas solares en tu vivienda. Desde el momento en que las placas están instaladas, comienzas a generar energía y, en muchos casos, a verter los excedentes a la red. Esto no lleva más de 1 o 2 días.

Registro en la comunidad autónoma

Después de la instalación, el siguiente paso es registrar la instalación en la comunidad autónoma correspondiente. Este registro es esencial para legalizar el sistema y poder vender los excedentes de energía generados. Aunque no puedas vender los excedentes hasta no haber recibido la aprobación, a partir de este momento puedes empezar a producir tu propia energía y a ahorra en tu factura de la luz con la producción de tus placas.

Esperar la aprobación

Una vez presentada la solicitud de registro, deberás esperar a que la comunidad autónoma apruebe la inscripción. Este es uno de los pasos que puede demorar más tiempo, dependiendo de la eficiencia administrativa de cada comunidad. Como comentábamos en el principio del artículo, todas las comunidades autónomas han acelerado estos procesos encontrándonos cada vez más casos entre nuestros clientes en los que la aprobación se recibe en menos de 1 mes.

Activación del contador

Después de que la comunidad autónoma apruebe la inscripción, la empresa distribuidora de energía activará el contador para que comience a registrar tanto el consumo como los excedentes de energía. Este paso es fundamental para que puedas recibir el pago por la energía que viertes a la red.

Ya me instalaron las placas. ¿Qué debo hacer para legalizarlas?

Una vez que la instalación de los paneles solares ha sido completada, se inicia el proceso de legalización. El marco regulatorio en el que se enmarca esta acción viene recogido en el RD 244/2019, que establece el mecanismo de autoconsumo con excedentes y sin. Los documentos que nos van a requerir están sujetos a la modalidad de autoconsumo.

En el caso de instalaciones de paneles solares residenciales, ésta debe estar recogida en alguna de las figuras que se contemplan en la nueva ley. Así, encontramos cuatro figuras principales:

• Autoconsumo con excedentes: La instalación fotovoltaica estará conectada a la red eléctrica general y verterá en ella los excedentes. Esto es la energía sobrante que no se consume en la vivienda. En este caso el propietario de la instalación no recibe compensación económica por esos kilovatios que vierte a la red ni tampoco vende esa energía en el mercado, simplemente lo que sobra se vuelca de manera gratuita.
• Autoconsumo sin excedentes: Al igual que la anterior, la instalación estará conectada a la red eléctrica. Sin embargo, un dispositivo evitará que los excedentes se viertan a la red. También puede ocurrir que dichos excedentes se recojan en una batería. 
• Acogido a la compensación simplificada de excedentes: En este caso los excedentes que se viertan a la red serán compensados por la comercializadora al propietario, en forma de descuento en su factura eléctrica. Esto debe solicitarse posteriormente a la puesta en marcha de la instalación.
• No acogido a la compensación simplificada de excedentes: En esta última figura los excedentes de autoconsumo serán vendidos en el mercado eléctrico por parte del propietario de la instalación. En este caso, el menos común para instalaciones residenciales por ser un proceso farragoso, el propietario de la instalación debe darse de alta como productor de energía para poder así vender su excedente eléctrico.

Normalmente en el caso de un inmueble de uso residencial se aplica el mecanismo de autoconsumo con excedentes acogidos a compensación, ya que su potencia es menor o igual a 100 kW. Esto quiere decir, como acabamos de explicar, que recibirás una rebaja en tu factura mensual por los excedentes de autoconsumo enviados a la red eléctrica general. Esto también se conoce como una batería virtual.

El procedimiento es el siguiente:

• La Comunidad Autónoma notifica a la distribuidora en un plazo de 10 días la recepción de la documentación que acredita la puesta en marcha de la instalación.
• Con esta documentación, la distribuidora tiene otros 5 días para enviar la modificación del contrato a la comercializadora y al consumidor.
• Una vez recibida la modificación, el consumidor puede notificar a la distribuidora en un plazo máximo de 10 días si hay alguna discrepancia.

El proceso completo que incluye la solicitud de permisos, el montaje y la legalización del sistema fotovoltaico suele durar entre 2 y 3 meses, aunque es cierto que, según la región, puede alargarse hasta los 5 o 6 meses.

Como has podido observar, la duración del proceso de legalización de placas solares es variable, ya que cada Comunidad Autónoma establece sus propios procedimientos a seguir. 

Lo mismo ocurre con la documentación a presentar. Debemos tener a mano la memoria técnica del proyecto, en donde aparece toda la información sobre la instalación. Aquí el dato más relevante es, sobre todo, la potencia total de la instalación, que debe ser menor de esos 100 kW mencionados para inmuebles residenciales. También nos pedirán el certificado de instalación eléctrica que nos ha debido entregar la empresa instaladora. Después según sea nuestra opción de autoconsumo, irán asociados otros documentos específicos. 

En este vídeo desgranamos paso a paso el proceso de legalización y de notificación a los ayuntamientos, añadiendo consejos útiles y explicando qué ocurre en cada momento

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