Llambilles, Girona16 paneles - sistema de 4,9 kWpInstalar placas como inversión rentable y sostenible
En la pintoresca localidad de Llambillas, a pocos kilómetros de Girona, Manel nos recibe en su hogar para compartir su experiencia con la energía solar. Como cliente y embajador de Sunhero, Manel ha instalado no solo una, sino dos instalaciones fotovoltaicas, y hoy nos cuenta cómo ha sido todo el proceso y los beneficios que ha experimentado.
Manel recuerda claramente el momento en que decidió instalar paneles solares en su hogar. “El motivo fue claro: el coste de la electricidad“, comenta, señalando que, aunque la sostenibilidad también era importante, el factor económico fue decisivo. Hace dos años, decidió realizar su primera instalación en Llambillas, y la experiencia fue tan positiva que repitió el proceso en su segunda residencia en la Sierra de Cazorla, aprovechando el clima más soleado del sur.
Al buscar opciones para la instalación, Manel exploró varias alternativas antes de decidirse por Sunhero. “Vi Sunhero y pensé, ¿por qué no probar?”, relata. Desde el primer momento, todo el proceso fue sencillo y bien asesorado, lo que le dio la confianza necesaria para seguir adelante. La instalación fue sorprendentemente rápida, completándose en apenas cinco o seis horas, mucho menos tiempo del que otras empresas le habían estimado.
Uno de los aspectos más impactantes de la experiencia de Manel con la energía solar ha sido el cambio en sus facturas de electricidad. “En los meses de mayo, junio, julio… la factura se acercó mucho a cero”, explica. Aunque todavía existen algunos costes que no pueden ser compensados por completo, las facturas de Manel se han reducido drásticamente, pasando de aproximadamente 200 euros a solo 18 o 20 euros en esos meses. Esta reducción ha sido un claro indicativo del éxito de su inversión.
Si bien el ahorro económico fue el motor principal de su decisión, Manel reconoce que la sostenibilidad ha ganado un peso importante en su visión a lo largo del tiempo. “Al final acabas viendo esa parte de sostenibilidad, de tema ecológico”, comenta, destacando que, además de la rentabilidad económica, la inversión en energía solar tiene un impacto positivo en el medio ambiente.
Manel ha hecho cálculos detallados sobre su inversión y los beneficios que ha obtenido. Entre las bonificaciones fiscales en el impuesto de bienes inmuebles (IBI), las deducciones en la declaración de la renta y el ahorro energético, estima que su inversión se amortizará en menos de cinco años. “He hecho números anuales en estos dos años y el ahorro ha estado sobre los 1.500-1.800 euros cada año”, señala. Este rápido retorno de inversión, combinado con los beneficios fiscales, hace que la instalación de paneles solares sea una decisión financieramente sólida.
Para aquellos que aún tienen dudas sobre la instalación de paneles solares, Manel ofrece un consejo claro: “No es un gasto, es una inversión”. Subraya la importancia de investigar diferentes opciones, pero asegura que la instalación fotovoltaica es una inversión que mejora tanto la economía del hogar como la calidad de vida. Además, al reducir los gastos eléctricos, se elimina la incertidumbre sobre los costes de energía a largo plazo.
Manel también aborda una preocupación común: la durabilidad y eficacia de las nuevas tecnologías solares. Gracias al asesoramiento recibido desde el principio, sus dudas sobre la vida útil de las placas y el plazo de amortización se disiparon rápidamente. “Desde que hice la primera videoconferencia con Federico, ya me lo aclaró todo muy bien”, comenta Manel, quien ahora se siente seguro de que su inversión le proporcionará beneficios durante muchos años.
La experiencia de Manel con Sunhero en Llambillas es un testimonio de cómo la energía solar puede transformar la economía de un hogar y, al mismo tiempo, contribuir a un futuro más sostenible. Con una instalación rápida, un ahorro significativo y un retorno de inversión en pocos años, Manel demuestra que la energía solar es una opción viable y ventajosa para cualquier hogar.